El pasado día 30 participamos en una mesa redonda en la que, con el patrocinio de Lündbeck-Otsuka y sin más límite que el cronométrico expusimos nuestra visión sobre el lugar en la terapéutica de los denominados LAI (long-acting antipsyschotycs) o antipsicóticos de acción prolongada de administración parenteral.
Estos fármacos viven una segunda juventud al calor de una intensa promoción tras la comercialización de paliperidona (Xeplión, Janssen Cilag) a la que dedicamos en su día un post en Sala de lectura y las versiones correspondientes de aripiprazol (Abilify Maintena, Lündbeck/Otsuka) risperidona (Risperdal Consta, Janssen Cilag) y olanzapina (Zypadhera, Lilly). Este último está calificado de Uso Hospitalariopor cuestiones de seguridad.
Con un coste muy superior a sus versiones orales, cabe la duda razonable de si su comercialización es una maniobra para huir de la competencia de los genéricos y cuál es el lugar en el tratamiento de la esquizofrenia